El delito de los empleados es pura y simplemente un delito cometido por un trabajador dentro de una empresa.  Recordando que el delito de los empleados es estrictamente el que practican los empleados, y no debe confundirse con el delito empresarial, no es nada nuevo que las personas delinquen por las más variadas razones. Independientemente de las razones, lo cierto es que los delitos generan pérdidas que deben ser reparadas, por lo que es sumamente importante actuar con cautela y celeridad.

En estas situaciones, es el abogado penalista quien orientará a su cliente sobre la mejor manera de proceder en cada caso concreto, desde la realización del atestado policial hasta la finalización del proceso penal.  Si estos procedimientos no son acompañados por un abogado penalista, pueden ocurrir excesos, errores o acusación injusta, generando daños morales y posibles reclamaciones laborales por parte del trabajador.  En algunos casos, los delitos cometidos contra la empresa pueden resultar extremadamente perjudiciales económicamente, no solo por el daño material causado sino también por la pérdida de reputación comercial.

Es por ello la importancia del abogado penalista en la realización del caso, con el fin de brindar la seguridad necesaria y el correcto seguimiento de todo el proceso penal, para, al final, si es posible, obtener la restitución de los daños y perjuicios. causados por los autores de los delitos.  Los delitos pueden ser cometidos por cualquier empleado, desde personal operativo hasta otros puestos de confianza (gerencia y dirección). Por lo tanto, en el caso de un delito de un empleado, la participación de un abogado penalista como asistente de la acusación es fundamental. El abogado penalista asistirá al Ministerio Público en la tramitación del delito laboral, con el fin de lograr una pronta y correcta aplicación de la ley, así como la restitución de daños y perjuicios.Para conocer más sobre cómo proceder en casos de delito laboral, consulte el abogado.